La menopausia: cuándo empieza y cuáles son los trastornos más frecuentes
La menopausia es un período de grandes cambios en la vida de toda mujer: desde el punto de vista fisiológico, marca el final de la vida reproductiva femenina y, en consecuencia, coincide con el fin del ciclo menstrual.
Por lo general, se produce entre los 48 y los 52 años, pero cada mujer es diferente y la perimenopausia, el periodo de transición antes y después de la menopausia propiamente dicha, puede variar en duración y síntomas muy complejos, tanto físicos como psicológicos y emocionales.
Entre los síntomas y trastornos más comunes de la menopausia caben mencionar:
- Sofocos;
- Trastornos del sueño/insomnio;
- Fatiga y agotamiento;
- Estrés e irritabilidad;
- Ansiedad y cambios de humor;
- Hipertensión;
- Dificultades de concentración y memoria;
- Pérdida gradual de densidad ósea y, por tanto, dolores articulares y osteoporosis;
- Pérdida de masa muscular;
- Ralentización del metabolismo;
- Hinchazón y dificultades digestivas.
Los síntomas de la menopausia pueden verse agravados por una deficiencia de magnesio debida a una ingesta alimentaria escasa de este mineral o a un mayor requerimiento relacionado con esta particular etapa vital de la mujer.
Veamos los beneficios directos del magnesio durante la menopausia y las dosis recomendadas para cubrir el requerimiento diario.
Los beneficios del magnesio durante la menopausia
El magnesio es fundamental para la salud de las mujeres de todas las edades y la menopausia no es una excepción. En particular, en esta etapa de la vida, puede ayudar en caso de:
- Trastornos del sueño/insomnio; el magnesio contribuye al funcionamiento normal del sistema nervioso, favoreciendo la relajación y reduciendo la sensación de cansancio. También tiene efectos beneficiosos sobre el ritmo sueño-vigilia.
- Cambios de humor, irritabilidad y estrés: el magnesio actúa directamente sobre la síntesis de numerosos neurotransmisores y favorece así la función psicológica, el mantenimiento de una actividad cerebral adecuada y el equilibrio electrolítico correcto.
- Dolores articulares y pérdida de densidad ósea: durante la menopausia, al cesar la actividad de las hormonas femeninas, los huesos tienden a volverse más frágiles, por lo que muchas mujeres corren el riesgo de padecer osteoporosis a medida que envejecen. El magnesio es fundamental para mantener huesos y dientes normales, porque interviene directamente en el proceso de síntesis del calcio.
- Pérdida de masa muscular: el magnesio favorece la síntesis proteínica, el metabolismo energético y el funcionamiento de los músculos, facilitando la relajación y contracción muscular y contribuyendo al proceso de almacenamiento y liberación de energía.
Cuánto magnesio tomar durante la menopausia
La ingesta diaria recomendada (RDA) de magnesio durante la menopausia es de 320 mg al día, que coincide con la de un adulto normal y deberían ser aportados por una dieta sana y equilibrada y una ingesta adecuada de agua.
Sin embargo, es probable que seguir una dieta rica en fuentes de magnesio no sea suficiente. Durante la menopausia, y en general al avanzar la edad, se reduce la capacidad de absorción de los nutrientes en el intestino, por lo que es necesario controlar la ingesta diaria de magnesio y de otros elementos esenciales, tales como hierro, minerales y vitaminas.
Otro factor que podría contribuir a que se produzca un déficit son los sofocos. Los sofocos, repentinos, molestos y que a menudo hacen sentir incómoda, son frecuentes durante la menopausia y, al provocar un aumento de la sudoración durante el día, conducen a una pérdida excesiva de minerales como el magnesio y el potasio, que por esta razón deben ser suplementados regularmente.